martes, 3 de junio de 2014

Inspiraciones: Los Vengamonjas


Aaaaahh los vengamonjas, Esteban y Xavi, dos chavales que se autodenominan acomodados y que su experiencia e influencias les ha llevado a hacer algo totalmente distinto y que, más o menos, funciona.

A pesar de que en su canal de Youtube tienen un número pequeño de suscriptores (acercándose a 30 mil en este momento) en comparación a los grandes magnates españoles en este soporte, ya han conseguido trabajo gracias a él, y el ruido que hacen desde su “pequeña” cueva, se oye más que las voces que muchos pegan enfrente de su webcam.

Los Vengamonjas son unos chicos que hacen vídeos, y da igual que usen el absurdo extremo, incomprensible e incluso desagradable (Da Suisa), que hagan cosas relativamente normales con su toque personal (Christmas Jalucha), o que se acerquen algo más a los estándares normales sin perder su magia (Detective Deketto), porque en cualquiera de estas ocasiones la respuesta es tremendamente positiva de parte de sus fans, entre los que nos hallamos nosotros sin ninguna duda.

Nunca sabes lo que va a pasar, que palabra se van a inventar, como va a sonar la canción que empieza, o que extraño nombre le van a poner a su protagonista. Puede que comience una escena que parezca decisiva en la historia y acabe sin haber pasado absolutamente nada, o puede que lo que estés viendo sea una toma falsa que les ha hecho tantísima gracia que no han podido quitarla del producto final. Ese no saber, ese no poder predecir, ese contexto que plantean es lo que engancha, es un absurdo cuidado, mimado y sacado del horno en el punto justo.

¿Cómo nos influyen? No lo sabemos, ellos no hacen viñetitas, no dibujan, pero forman parte de esa corriente post-humorista nueva y bastante extraña que nos hace entrar en ese estado de risa distinta, de conexiones extrañas, de casi no humor a veces, es difícil de explicar, pero joder, hacer algo difícil de explicar tiene su mérito, ¿no?


lunes, 2 de junio de 2014

Quiere causar buena impresión


Inspiraciones: Maestro Noguera


¿Qué tienes, Noguera, que nos enamoras? Definir a Noguera se nos antoja tan complicado como hacer ahora mismo una comparación metafórica y/o análoga a la dificultad de definirlo (y así en bucle).

Es un tipo capaz de ver la realidad más allá de lo razonable, de forzarla profundamente, de dar saltos entre lo absurdo y lo incómodo, un superdotado de las ocurrencias, un artista, un contorsionista del chiste.

Desde luego, lo de este hombre es un humor peculiar, plantea escenarios tan ridículos y a menudo tan cercanos a la realidad que solo el hecho de imaginarlos nos hace reir. Véase esta situación, una ópera magna del surrealismo Nogueriano (me recreo): “Dos personas que en la cola del supermercado se ceden mutuamente el paso, dado lo escaso de la compra. Llevados por su infinita amabilidad proceden a darse la prioridad mutua e incesantemente («Usted». «No, no, usted») hasta convertirse en una máquina rotatoria, un auténtico shuriken de caballerosidad , estrella ninja en la que se cruza un niño y muere.”

Ja, ja, ja (qué tontería, ¿no?, reír en un texto...)

Miguel Noguera se ha hecho popular gracias al Ultrashow, un formato de espectáculo en el que, a veces apoyado de dibujos, recita una serie de ideas extrañas. Las matiza, las opina, las analiza y las cuenta de una forma que te absorbe y te sorprende siendo capaz de terminar haciendo tirabuzón del rizo.


Una cosa está clara, si tenemos que hacer una lista de referentes que nos influyen, Noguera estaría en primera  posición.